Seguros y cuentas, para el ahorro más conservador
Lograr una rentabilidad de entre el 1 y el 1,40 por ciento debe ser el objetivo del ahorrador más conservador. Las cuentas ofrecen rentabilidades superiores, pero limitan el importe y el periodo de la remuneración.
Batir la inflación, superar la rentabilidad media y reducir al máximo el impacto fiscal en las ganancias. Estos son lass tres condiciones básicas que debería cumplir un buen producto de ahorro.
Cuentas remuneradas y seguros de ahorro comercializados por las aseguradoras o incluso el Ahorro 5, que nació a principios de este año, son las principales apuestas. Miguel Ángel Bernal, profesor del Instituto de Estudios Bursátiles, aconseja las dos últimas opciones, puesto que las rentabilidades en depósitos irán cayendo hasta aproximarse a cero. «Los seguros de ahorro tienen una duración de entre tres y cinco años y ofrecen una rentabilidad en torno al 1,25 por ciento, mientras que el Ahorro 5 permite no pagar impuestos por las ganancias» y, además, como recuerda, una vez que se haya cumplido el plazo de cinco años se puede prorrogar.
Para Víctor Alvargonzález, director de inversiones de Tressis, la mejor opción son los seguros de ahorro, ya que el «ahorrador más conservador puede obtener una rentabilidad fija a cambio de un año de permanencia». En cuanto a las ganancias que se pueden lograr pueden llegar hasta el 1,40 por ciento neto. Pero Alvargonzález también advierte que la tendencia del mercado está yendo a una parte de los rendimientos en función de los beneficios. En ese sentido, aconseja saber dónde se encuentra el producto adecuado según el perfil, la solvencia de la entidad y la letra pequeña del producto: que sea sencillo y que se detalle en lo que se está invirtiendo.
En cuanto a productos concretos, Mutua Madrileña comercializa el Plan Ahorro Plus, con una rentabilidad del 1,25 por ciento y está indicado para los ahorradores más conservadores. Mapfre, que ha realizado una fuerte apuesta por el Ahorro 5 y ya capta 1 de cada seis euros invertidos en este producto, ofrece una rentabilidad del 1 por ciento, a lo que hay que sumar una participación de beneficios. En cuanto a los problemas de liquidez a corto plazo, éstos se solventan tras pasar el primer año en el que el cliente podrá rescatar la inversión.
Nuevas cuentas
Son otra alternativa para ganar rentabilidad por encima del mercado, llegando a remuneraciones de entre el 3 por ciento y el 7 por ciento, pero a cambio, el cliente debe adquirir una fuerte vinculación con el banco, aunque también cuentan con limitaciones como el hecho de que la cantidad máxima a remunerar esté limitada o también el periodo. Así, destacan la Cuenta Nómina de Bankinter, con una rentabilidad del 5 por ciento el primer año y del 2 por ciento el segundo año y la Cuenta 1 2 3 con un 3 por ciento y 15.000 euros máximo. Aunque en ese sentido, Alvargonzález señala que los bancos están optando por ofrecer ciertas rentabilidades atractivas pero con un compromiso de permanencia que conlleva la contratación de una serie de productos, por lo que habría que estar muy atentos a las comisiones y gastos que implica. Como recuerda Estefanía González «el precio que habría que pagar por lograr una alta remuneración son las vinculaciones. Prácticamente todas las ofertas de cuentas remuneradas con una retribución algo atractiva nos exigen domiciliar la nómina, recibos, contar con una tarjeta…».
Fuente: finanzas