La ciencia francesa premia a las matemáticas aplicadas españolas
La Academia de las Ciencias de Francia condecora al matemático español Ildefonso Díaz
La institución ha otorgado sus premios anuales, dotados con 1,2 millones de euros
Este martes ha sido la gran fiesta de la ciencia francesa. En la imponente sala bajo la Cúpula del Instituto de Francia se han repartido los premios 2015 a la excelencia. En total, más de 1,2 millones de euros en 62 galardones a investigadores en matemáticas, física, mecánica, ciencias del universo, química y biología. A punto de cumplir los 350 años de historia, en esta gran ceremonia anual en la que se reconoce la labor de investigadores franceses o de otros lugares siempre que tengan relación con Francia se ha colado un español: Ildefonso Díaz, director del Instituto de matemáticas interdisciplinarias de laUniversidad Complutense de Madrid.
En realidad, en los premios de este año hay un segundo español, Lluis Quintana-Murci, si bien este, que dispone de la doble nacionalidad, trabaja en el Instituto Pasteur donde ocupa la dirección de la unidad de genética evolutiva humana. Ambos destacan, con sana envidia, el gran apoyo financiero con el que cuenta la Academia francesa para poder distribuir sus premios y fomentar la ciencia, con un amplio ramillete de patrocinadores: Allianz, EDF, Airbus, Dassault e Ifremer, entre otros, aparte de las aportaciones oficiales.
El galardón más importante de este año, el premio bienal Émile Jungfleich, dotado con 120.000 euros, ha sido para el también investigador del Instituto Pasteur Pierre-Jean Corringer por su trabajo sobre los receptores implicados en las funciones cerebrales. El galardón que ha recibido Lluis Quintana, también bienal y dotado con 32.500 euros, se debe a sus estudios sobre la diversidad del genoma humano. “Con él intentamos reconstruir el pasado de nuestra especie», explica, «conocer las migraciones y entender la relación con los agentes patógenos que durante miles de años han influido en esa diversidad”.
El premio de Ildefonso Díaz, el Jacques-Louis Lions, dotado con 10.000 euros, tiene la particularidad de que reconoce un trabajo realizado fuera de Francia, si bien Díaz tiene una estrecha relación con la ciencia gala. “Díaz es hoy la figura más destacada y dinámica de las matemáticas aplicadas españolas”, reza el texto del premio.
A su lado, tras la entrega de premios, Haim Brezis, matemático y académico, además de director de la tesis del propio Díaz, valora su trabajo, pero también el realizado en España en los últimos 40 años. “Conocí España en 1974 y entonces no había nada. España es un país que ha partido de cero y ha realizado una evolución que es casi única en el mundo”, asegura.
“La ciencia no tiene fronteras”, dice Díaz, que confía en esta verdad para superar la escasa financiación que logra la ciencia española. Tal superación viene dada ahora por los proyectos europeos e internacionales. «Mientras en España se reduce la financiación de la ciencia, en el resto de Europa aumenta. Ese es un motivo de esperanza», dice. Díaz ha sido designado ahora para dirigir un proyecto europeo dotado con cuatro millones de euros en el que participan matemáticos de varios países del continente.
“Aquí la inversión no está mal; sobre todo con respecto a España”, explica Lluis Quintana. “Lo mejor es que es una política de Estado que no cambia en función de que el gobierno sea de un color o de otro”.
Este martes, la Academia, en solemne ceremonia precedida de redoble de tambores, solo ha entregado la mitad de los premios. La gran fiesta de la ciencia francesa tendrá una segunda parte el próximo 24 de noviembre. A partir de ahí, la institución preparará el aniversario de este monumento a la ciencia creado en diciembre de 1666 por el ministro de Finanzas de Luis XIV Jean-Baptiste Colbert.
Fuente: Elpaís